Diario de León, 1.09.2004

Decenas de camisetas, jerseys, pantalones, pañuelos, y todo tipo de prendas textiles roídas, ajadas, deterioradas, estropeadas o gastadas por el uso y el paso del tiempo, decoran, desde hace más de dos meses, el paisaje de la calle Principal de la localidad leonesa de Oteruelo de la Valdoncina.

La estampa es desoladora. Las prendas están esparcidas por el arcén de la vía principal sin que nadie haga nada por remediarlo, en un municipio que a pesar de estar situado a dos kilómetros de la capital, carece de una buena red de comunicaciones, de infraestructuras y de un buen servicio de limpieza que limita sus actuaciones a una vez por semana.

La situación se remonta al 2002, año en que la ya extinguida Concejalía de Bienestar Social del Ayuntamiento de León firmó un convenio para la recogida de ropa usada con la ONG Humana, en el que la empresa se comprometía a correr con todos los gastos de instalación de los contenedores metálicos, su limpieza y mantenimiento con una regularidad trimestral.

En agosto del año pasado, el Ayuntamiento suspendió el contrato con Humana por un presunto fraude en el destino de las prendas textiles y su posible relación con una secta de origen escocés.

Un año después, muchos de los contenedores mantienen su ubicación inicial, entre ellos el ubicado en Oteruelo de la Valdoncina, que además presenta una imagen dantesca y vergonzosa para la localidad.